El pasado viernes día 24, el equipo Runners Legión integrado por D. Francisco
Binaburo y por quien suscribe estas líneas, participó en una nueva competición
atlética en la comarca del Aranda, representando nuevamente a esta Hermandad de
Antiguos Caballeros Legionarios de Zaragoza.
La distancia a cubrir fue de
aproximadamente unos 9000 metros, llevándose a cabo por un circuito urbano.
Se dio la circunstancia de que esta
ocasión sirvió para que el citado equipo estrenara camisetas, el característico
color negro con la Bandera nacional y el emblema de La Legión.
Puedo asegurar que el derroche de
facultades, el esfuerzo generoso y la entrega fue total. Pero lo que
verdaderamente debo de destacar por encima del resultado es que a pesar del
paso del tiempo, ambos continuamos manteniéndonos firmes ante la adversidad,
seguimos demostrando que cuando nos enfundamos la camiseta y nos calzamos las
zapatillas, con la firmeza propia de los años de experiencia, con el espíritu
incansable del trabajo y sacrificio, nuestro comportamiento sigue siendo
ejemplar y reconocido.
El cariño de los lugareños, los
abrazos de nuestros compañeros de años de fatigas está incluso por encima de
los resultados obtenidos, que por cierto fueron buenos.
El público que abarrotaba las
calles por donde transcurrió la carrera no paro de animar a los corredores participantes,
y quien más aplausos y vítores recibió fue Francisco Binaburo, el más veterano
de los participantes.
Por todo ello, al finalizar la
carrera con el orgullo de engrosar una vez más el caudal del cumplimiento del
deber, con la satisfacción de oír como el público daba vivas a La Legión,
nuevamente recibimos las felicitaciones de los organizadores de la carrera.
Cuando D. Francisco Binaburo
traspasó la línea de meta, se llevó la ovación más sonora y prolongada de toda
la competición, es el mejor homenaje que podía recibir, era el reconocimiento a
su calidad humana y deportiva, es lo que tiene formar parte de la leyenda.
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