HORMILLA 2016 – HOMENAJE AL CABO
SUCESO TERREROS
En una templada mañana del mes de
mayo, de esas que la primavera nos acostumbra a regalar, con su cielo limpio,
de ese azul intenso, con el sol en su máximo esplendor, acariciándonos una
suave brisa, por momentos intensa pero agradable de soportar, hoy 21 de mayo
nos encontramos en Hormilla (La Rioja) donde se celebra una vez más el solemne
y entrañable Acto de Homenaje al Cabo Caballero Legionario D. Suceso Terreros
López.
Nuestra Hermandad de Antiguos Caballeros
Legionarios de Zaragoza quiso acudir a la cita y compartir con las Hermandades
de Barcelona, Burgos (Organizadora del Acto) Santander y Valladolid el recuerdo
al héroe, natural de la localidad y caído en combate en defensa del Blocao de
la Muerte durante la noche del 15 de septiembre de 1921 junto a sus 15
Legionarios.
La Hermandad de Antiguos Caballeros
Legionarios de Zaragoza, partió de la capital con su Presidente Ilmo. Sr. D.
Luís Carlos Asarta Cuevas, le acompañaba el Vicepresidente D. Luís Aragües, el
Secretario D. Fernando Cabello, los vocales D. Francisco Binaburo, D. Valero
Ibañez, D. Carmelo Herrero y quien suscribe el presente, así como una nutrida
representación de nuestros socios de la Hermandad.
A las 11:45 horas en la Plaza de La
Iglesia, los uniformados en posición de firmes, con sus Guiones y Banderines al
frente esperan ansiosos el inicio del Acto. Estamos rodeados de público que nos
transmite su buena acogida.
Son las 12:00 horas, a paso lento
los Guiones y Banderines avanzan, les sigue la formación y la Banda de Música,
suena el paso firme y marcial sobre el suelo de madera de la Iglesia de San
Martín de Tous donde los párrocos D. Eduardo y D. Fernando celebraran la Santa
Misa.
Las autoridades ocupan su puesto
destacando la presencia del Delegado de Gobierno de La Rioja D. Alberto Bretón,
el Alcalde de la localidad de Hormilla
D. Antonio Fernández de Bobadilla Soto y el Presidente de nuestra
Hermandad, Ilmo. Sr. D. Luís Carlos
Asarta Cuevas.
Se rinde homenaje a nuestro héroe,
es el recuerdo de quienes sabían que iban a morir y afrontaron su suerte con
una sonrisa en los labios, sabiendo que su recompensa no era otra que morir por
España y por La Legión.
Por ello quienes nos reunimos hoy
en Hormilla, cuna de nuestro héroe Cabo Suceso Terrero López, con encendido
fervor legionario, quisimos honrar y exaltar las virtudes humanas y legionarias
de quienes entregaron su vida.
¡Legionarios a luchar! ¡Legionarios
a morir!
Durante el Acto religioso ambos
párrocos evocaron la figura del héroe, así como el comportamiento de los
legionarios y en el día de la Misericordia nos recordó nuestro acercamiento al
Cristo de la Buena Muerte.
El excelente coro de voces
compuesto de vecinos del pueblo fue extraordinario.
El antiguo Caballero Legionario,
perteneciente a la Hermandad de Burgos D. Jesús Villamendría canto una saeta
legionaria y al finalizar todos como una sola voz interpretamos el Novio de La
Muerte.
Ya en el exterior nos dirigimos a
la avenida principal para acercarnos al Monolito a la entrada del pueblo, sito
en la Plaza que lleva el nombre de nuestro recordado héroe.
Una marea humana está expectante,
se divisa a lo lejos, están esperándonos.
Al frente de la formación D.
Francisco Binaburo quien asumirá el mando, los Guiones y Banderines desplegados
al viento, los uniformados preparados, la Banda de tambores y cornetas lista.
Suenan las notas metálicas,
atruenan los tambores. ¡Adelante!
Por España, por La Legión, por esa
llama legionaria que ni se apaga ni se apagará, hombres venidos de diferentes
ciudades de nuestra Patria, hombro con hombro marchan con la característica
disciplina, con su espíritu de cuerpo, vamos hacia nuestro héroe, por él. ¡Viva La Legión!
Los lugareños y todo aquel que se
desplazó, no cabe en sí de gozo, vivas y más vivas, aplausos, cientos de
aplausos, nos sentimos orgullosos, jóvenes o mayores, pese a la edad, nos
sentimos lo que somos, Caballeros Legionarios.
Frente al Monolito con la efigie
del Cabo Suceso Terreros López, bajo la Presidencia de nuestro Presidente Ilmo.
Sr. D. Luís Carlos Asarta Cuevas, rendimos honores, le es depositada una corona
de laurel.
Se recitaron los espíritus del
Credo legionario: el Espíritu de compañerismo y La Bandera de La Legión. Se
dieron los vivas reglamentarios y se interpretó el Himno de La Legión.
Para finalizar, el tradicional
desfile ante las autoridades y todo el público que agrupado aplaudía una y otra
vez.
Suenan las notas melodiosas, con
brío, con marcialidad, las filas exactas, los brazos arriba y abajo, que
elegancia, los legionarios son un derroche de energía.
Acabado el desfile, en posición de
firmes, D. Francisco Binaburo se dirige a los uniformados, estamos expectantes,
va a dirigirnos unas palabras, nos sentimos orgullosos de ser dignos de recibir
unas sencillas pero emotivas palabras de quien ha dirigido la formación durante
el Acto.
Dice a viva voz: ¡Caballeros
Legionarios! Hoy hemos vuelto a sentir y recordar nuestra juventud, el recuerdo
imborrable de los días del desierto, con el mismo nervio, forjados como el
mejor acero, voluntariosos, desprendidos, fieros si diera lugar, pasaran los días y los años y siempre fieles,
siempre Caballeros Legionarios. ¡Viva España! ¡Viva La Legión!
Tras sus palabras, al romper filas,
nos fundimos en abrazos, símbolo indestructible de unión, de quienes anidan
fecundos y fervorosos sentimientos legionarios en su corazón.
Viva el Cabo Caballero Legionario
D. Suceso Terreros López.
Una vez concluido el desfile en la
avenida principal, los Guiones y Banderines y los uniformados se trasladaron hasta
la Plaza del Ayuntamiento de Hormilla donde tras romper filas se dio por
finalizado el Acto, a continuación en la Casa Consistorial, en el salón de
plenos el Alcalde D. Antonio Fernández de Bobadilla Soto ofreció un ágape y
vino español a dos representantes de cada Hermandad participante, nuestra
Hermandad estuvo representada por seis socios ya que quien presidió el Acto fue
nuestro Presidente el Ilmo. Sr. D. Luís Carlos Asarta Cuevas.
A las 14:30 horas en el Pabellón
Deportivo de la localidad se sirvió un suculento menú típico de la región:
Patatas a la riojana servidas en platos de barro que luego los entregaron de
regalo a cada comensal, los buenos caldos aromáticos, pera natural de la
tierra, mil hojas de nata, café y leche de pantera. Tras los brindis, la Banda
de música de la Hermandad de Barcelona, amenizó con su buen hacer la presencia
de los asistentes.
A las 17:00 dimos por concluida
nuestra presencia y tras despedirnos de las autoridades y de las respectivas
Hermandades, partimos de regreso a nuestra ciudad llegando a las 19:30 horas.
MIGUEL LUIS CASADO